¿Por qué combatir las moscas?

Las moscas son tan contagiosas como las cucarachas.

Las moscas tienen tanto potencial de transmitir enfermedades como las cucarachas. Si una cucaracha caminara sobre su mesa en un restaurante, usted se iría de inmediato. Sin embargo, si una mosca se posara en su plato, probablemente solo la apartaría y seguiría comiendo. A pesar de ello, las moscas tienen tanto potencial de transmitir enfermedades como las cucarachas.

Se ha demostrado que los insectos voladores transportan una amplia variedad de microorganismos peligrosos en todo su cuerpo, en su saliva y en sus excrementos, incluyendo E.coli, Salmonella, Klebsiella, Campylobacter y muchos otros. Incluso una dosis diminuta de cualquiera de estos microorganismos es suficiente para causar enfermedades graves.

Como mínimo, la contaminación por insectos reduce la calidad del producto, haciéndolo invendible. Por ley, los alimentos que se venden deben ser saludables y estar libres de contaminación. Las empresas están obligadas a demostrar diligencia debida, lo que significa que han tomado todas las precauciones necesarias para evitar la contaminación por plagas de insectos voladores.

Las plagas de insectos voladores son altamente móviles y no hacen distinción entre los alimentos preparados para nuestro consumo y cualquier otra superficie en la que se posen, caminen, defequen o coman. Muchas especies de insectos tienen hábitos particularmente desagradables y, por lo tanto, representan un alto riesgo de contaminación para nuestros alimentos.
Teniendo esto en cuenta, el control de moscas va más allá de colgar cualquier unidad en un lugar visible. Su efectividad, según el tipo y la ubicación, influye directamente en el nivel de protección que usted y sus clientes reciben. Los equipos de baja calidad o mal ubicados pueden incluso empeorar la situación al generar una falsa sensación de seguridad.Teniendo esto en cuenta, el control de moscas va más allá de colgar cualquier unidad en un lugar visible. Su efectividad, según el tipo y la ubicación, influye directamente en el nivel de protección que usted y sus clientes reciben. Los equipos de baja calidad o mal ubicados pueden incluso empeorar la situación al generar una falsa sensación de seguridad.
Todo equipo de control de moscas necesita un mantenimiento regular para seguir siendo eficaz. Aunque el costo inicial puede ser importante, también deben considerarse los costos de mantenimiento y funcionamiento. Para mantener la máxima eficiencia, cambie los tubos idealmente cada 6 meses, pero al menos una vez al año.

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